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ERRORES AL APLICAR MASILLA O PLASTE



CINCO errores comunes al aplicar masilla o plaste.



Aplicar masilla o plaste no tiene mucho secreto. El manejo de la llana y la espátula mejoran mucho con la práctica, es cierto, pero quien más quien menos puede reparar un agujero, grieta o una fisura, y un bricolador medio puede alisar una pared entera sin demasiado problema, sabiendo que más adelante podrá lijar cualquier irregularidad. Ahora bien, si cometemos ciertos errores antes de coger la llana y la espátula, es casi seguro que el resultado no será bueno, por mucho que después seamos unos virtuosos con las herramientas. Estos son los cinco errores más habituales cuando trabajamos con masillas o plastes:


01 No escoger la masilla o plaste adecuado

Hay muchas clases de plaste. Casi tantos como tipos de trabajo. Algunos de ellos, como el Aguaplast Standard, son de uso general y lo mismo podemos usarlos para reparar una pequeña grieta, como para fijar la caja de un enchufe, por ejemplo; pero otros, en cambio, son muy específicos. Por ejemplo, hace falta un plaste muy adherente, como el Aguaplast express , para cubrir azulejos, o uno muy duro, como el Aguaplast masilla universal, para colocar una barandilla.

Por eso es muy importante que, antes de ponernos manos a la obra, escojamos la masilla o plaste correcto. Piensa que con una masilla o plaste adecuado es posible que no obtengas un buen resultado, pero con una masilla o plaste inadecuado es seguro que no lo obtendrás.



02 No respertar la medida de agua

Todos los estuches de Aguaplast indican la medida exacta con la que debe mezclarse el producto. Respeta siempre dicha medida. Un exceso de agua o una falta de ella no solo influyen en la consistencia del plaste, sino que pueden alterar las propiedades químicas del producto, haciendo que su rendimiento sea deficiente. Es decir, que no se trata de que un plaste vaya a tardar algo más en secarse

porque le hayamos añadido un poco más de agua; es que puede que, una vez seco, su resistencia no sea la que debiera tener.



03 No hacer bien la mezcla

Por muchas prisas que tengamos, una cosa en la que no podemos escatimar tiempo es en la mezcla de la masilla o plaste. La masa debe quedar consistente, elástica y sin grumos, y esto es válido

para el plaste que queda adherido al fondo y las paredes del recipiente de mezclado. Recuerda, si siguen

quedando zonas en las que el polvo del plaste es visible, es que no has mezclado lo suficiente.



04 Intentar retrasar el fraguado

Uno de los errores más comunes cuando afrontamos trabajos de cierta envergadura consiste en mezclar de una vez una gran cantidad de masilla o plaste de secado rápido. Ten en cuenta siempre el tiempo de trabajo del producto, no mezcles 20 kilos de plaste como Aguaplast Express si no eres un auténtico profesional capaz de despachar 20 kilos a espátula y llana en media hora. Y sobre todo, si ya has cometido el error de mezclar demasiado producto, ¡jamás intentes enmendarlo añadiendo más agua cuando el plaste comience a secarse en el cubo, ni vuelvas a removerlo! Eso haría que la estructura molecular que ya había empezado a formarse se rompiese, y como ese proceso no puede volver a iniciarse, el plaste, muy probablemente, perderá su dureza y su capacidad de adherencia. Aunque después lo veamos seco y creamos que no hemos librado, lo cierto es que es casi seguro que la masilla o plaste no estará bien. Sería el equivalente en plastes al famoso (y temido) yeso muerto.


05 No respetar los tiempos de secado

Aunque los tiempos de secado varían ligeramente dependiendo de la temperatura y de la humedad ambiental, ten siempre en cuenta el dato orientativo que viene en el estuche del producto. Algunos plastes permiten aplicar varias manos, una sobre otra, aunque la capa anterior no esté completamente seca, pero eso es algo que viene específicamente reseñado en el envase. Para todos los demás plastes o

es fundamental respetar el tiempo de secado y no debemos lijar, pintar ni aplicar otra mano antes de que el producto esté completamente seco. Como ves, se trata de cinco consejos bastante lógicos y muy fáciles de seguir. Y es que, a la hora de la verdad, aplicar plaste no tiene nada de complicado.



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